La pareja de prometidos Erin y Jean-Baptiste compró un castillo de cuento del siglo XVI en la campiña francesa. Pero mientras que puede haber parecido hermoso en el exterior, el interior era todo lo contrario…
Amor a primera vista
A finales de la década de 2000, la inglesa Erin Choa decidió trasladarse de Londres a Escocia para estudiar en Edimburgo. Al otro lado del Canal, el francés Jean-Baptiste tomó una decisión similar. Ambos se trasladaron a la capital escocesa para cursar sus respectivos estudios.
No sabían que sus vidas estaban a punto de cambiar. Erin conoció al joven ingeniero poco después de su llegada, y no tardaron en enamorarse el uno del otro. Jean-Baptiste sólo había planeado quedarse en Escocia durante un año, pero esos planes cambiaron pronto después de conocer a su alma gemela.