Una dieta sana y equilibrada puede aportar muchos beneficios, especialmente durante este periodo de pandemia. Nuestros alimentos y bebidas contienen muchas vitaminas y minerales que pueden ayudarnos a luchar contra las infecciones. Nuestro hábito alimentario también influye en nuestros problemas de salud más adelante, como la obesidad, la diabetes, las enfermedades cardíacas y muchas más.
Diferentes partes de nuestro cuerpo realizan diferentes funciones y todo el proceso es increíblemente complejo. No hay ningún componente alimentario que pueda satisfacer todas las necesidades de nuestro cuerpo. Los distintos alimentos contienen diferentes valores nutricionales que nos mantienen fuertes y sanos. Por eso es muy importante consumir una variedad de alimentos ricos en diferentes tipos de nutrición. Puedes tomar una mezcla de alimentos básicos como el trigo y las legumbres. Intenta tomar mucha fruta y verdura fresca. Los alimentos de origen animal también son una buena fuente de nutrición.
Intenta reducir la sal. A la hora de tomar tentempiés, puedes elegir frutos secos sin sal y frutas en lugar de tomar alimentos ricos en azúcares, grasas y sal. El consumo excesivo de grasas saturadas puede aumentar el riesgo de obesidad, enfermedades cardíacas y diabetes. Por ello, puedes sustituir la mantequilla y el queso por cualquier aceite más saludable como el de girasol. Intenta evitar la carne roja y consume proteínas de origen vegetal.
Por último, hay que limitar el consumo de azúcar. Demasiado azúcar puede causar obesidad, lo que conlleva graves problemas de salud crónicos. Por lo tanto, es muy importante reducir la ingesta de dulces dañinos y bebidas azucaradas de su dieta diaria. Tampoco debes permitir el exceso de sal y azúcar a tus hijos. Los expertos no recomiendan añadir azúcares en los alimentos complementarios para los niños menores de dos años.