El consumo excesivo de carne y alimentos procesados se ha convertido en un grave problema de salud en todo el mundo. Por lo tanto, los expertos en salud recomiendan una dieta más simple y rica en vegetales y frutas.
Un estudio reciente revela que la combinación de la dieta mediterránea y el ayuno intermitente ofrece muchos beneficios para la salud. Este plan de dieta combinada puede protegerte de los problemas cardíacos. Aquí está un resumen de los resultados de ese estudio.
Créditos: S.-Hermann-F.-RichterLa carne roja está llena de colesterol y grasa. En esta situación, todos deberíamos hacer hincapié en el plan de la dieta mediterránea. Esta dieta rica en plantas nos ayuda a evitar el consumo excesivo de carne roja. Muchos alimentos de origen vegetal como el aceite extra virgen y los lácteos fermentados pueden ser una buena opción para nuestra salud. Incluso los mariscos pueden ser la mejor fuente de proteínas y otros minerales. Otro plan de dieta popular es el ayuno intermitente. En esta forma de comer, es necesario comer durante un cierto período del día. Es posible que tengas que ayunar durante 12 a 16 horas del día.
Créditos: Shutterbug75Una reciente publicación en el Journal of the American College of Cardiology reveló que si se combina este plan de dos dietas: la dieta mediterránea y el ayuno intermitente, podría ser beneficioso para la salud del corazón. La investigación también muestra que las dietas basadas en plantas son mejores para la salud cardiovascular.
Los investigadores también dijeron que una dieta vegetariana completa tiene otros inconvenientes y déficits nutricionales debido a la falta de proteína animal. Especialmente sugieren consumir mariscos para obtener vitaminas B12 y D que provienen únicamente de productos animales. Por lo tanto, este estudio recomendó consumir más vegetales y menos carne roja. También es prudente aumentar el consumo de pescado, productos lácteos, huevos y pasta en una cierta cantidad.
Créditos: Deborah Breen WhitingSin embargo, hay que recordar que el ayuno intermitente así como la dieta mediterránea puede no ser adecuada para todos. Si te estás recuperando de un desorden alimenticio, tienes diabetes u otras enfermedades crónicas, estás haciendo ejercicio físico intenso o estás esperando un bebé recién nacido, entonces es prudente que consultes con tu proveedor de atención médica para planificar tu dieta.