Crosby

Crosby estaba haciendo todo lo posible para decirle algo, el problema es que no podía entenderlo. Miró hacia la pared que tanto le interesaba a su perro, y luego miró el monitor con las imágenes.

Se rascó la cabeza, se levantó de la silla y fue a inspeccionar la pared. Mientras lo hacía, Crosby entró corriendo en la habitación y movió felizmente la cola. Crosby no había estado tan animado en días. Decidió escuchar a su perro y miró la pared con atención.