Y el supuesto feudo de Kate y Meghan continuó en los titulares. En noviembre de 2018, de hecho, se informó que Harry y Meghan se estaban mudando fuera del Palacio de Kensington, y por lo tanto lejos de William y Kate. Una fuente anónima afirmó además al Daily Mail que una ruptura entre las mujeres reales fue la causa de dicha reubicación.

Además, el supuesto “amigo cercano de los Cambridges” dijo a la publicación que las dos duquesas no ven a los ojos. “Kate y Meghan son personas muy diferentes”, afirmaron. “Realmente no se llevan bien.” Ese mismo mes, sin embargo, otra fuente sugirió a The Sun que el problema no estaba de hecho con las esposas reales; en cambio, en realidad eran William y Harry los que estaban luchando.